La Organización Internacional del Trabajo (OIT) aprobó en junio de 2019 el Convenio 190 sobre el derecho de toda persona a un mundo libre de violencia y acoso en el trabajo. Tres años después el gobierno español ha ratificado este convenio, de lo que nos congratulamos.
Se trata de un convenio de especial relevancia porque reconoce este derecho a todas las personas, pero hace especial hincapié en las mujeres, señalando y reconociendo que la violencia y el acoso por razón de género afectan de manera desproporcionada a éstas.
El Convenio reconoce que la violencia y el acoso en el mundo del trabajo pueden constituir una violación o un abuso de los derechos humanos, y que son una amenaza para la igualdad de oportunidades, y son inaceptables e incompatibles con el trabajo digno.
Entre sus principios fundamentales, el Convenio establece la importancia de adoptar una estrategia integral para prevenir y combatir la violencia y el acoso, poner mecanismos de control de la aplicación y seguimiento de procedimientos existentes, prever sanciones y velar para que las víctimas tengan acceso a vías de recurso, reparación y medidas de apoyo. Además, insta/obliga a los gobiernos a desarrollar herramientas y actividades de educación, formación y sensibilización.
Asimismo, aborda la violencia doméstica, que puede afectar al empleo, la productividad, así como a la seguridad y salud, y establece que los gobiernos, las organizaciones de empleadores y de trabajadores y las instituciones del mercado de trabajo pueden contribuir a reconocer, afrontar y abordar el impacto de la violencia doméstica.
