Según fuentes oficiales, en El Salvador, de enero a junio de 2020, se han registrado 6.839 embarazos de niñas y adolescentes entre diez y diecinueve años. Esto representa que un 1,15% de las niñas de esta edad quedan embarazadas.
La falta de acceso a la educación integral en sexualidad de niñas y adolescentes, tiene como consecuencia la coerción y los abusos sexuales, embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual. Los embarazos de las adolescentes ponen en riesgo su vida y las condena a vivir en la pobreza y la exclusión.
Las chicas embarazadas a menudo están expuestas a la discriminación social y económica y al abandono escolar; ésto les comporta un rechazo por parte de sus amigos, vecinos y familiares, incluidos sus propios padres y graves secuelas psíquicas (aumento de la tasa de suicidio, depresión, rechazo por parte de la madre al bebé y baja autoestima).
En algunas comunidades rurales, las chicas incluso reciben presión social para casarse con su abusador.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el riesgo de muerte después de un embarazo es el doble de elevado en niñas de quince a diecinueve años que para mujeres entre veinte y veinticuatro años, y que la tasa de mortalidad materna puede ser hasta cinco veces superior para niñas de diez años que para mujeres de veinte años.
En el Salvador tener sexo con niñas es delito. Aun así, las estadísticas caen por su propio peso. Esto es a causa del tabú que supone el hecho de hablar, informar y educar niños y niñas en una sexualidad responsable. Por eso, desde Sindicalistes Solidaris, la Escuela del Trabajo Digno y el Sindicato de Trabajadores de la Educación de Salvador (SITES) y con el apoyo del Ayuntamiento de Lleida, se ha iniciado una campaña pionera al país dirigida a maestros y formadores y formadoras para que dentro del marco de la promoción del trabajo digno, dentro del sector educativo, se pueda iniciar un proceso de sensibilización y educación en las escuelas y trabajar conjuntamente con padres y madres, niños y niñas para disminuir esta lacra que afecta cada año miles de adolescentes.
Originalmente, este proyecto estaba previsto llevarlo a cabo de forma presencial. Actualmente las escuelas del Salvador están cerradas a causa de la covid-19, por eso se ha transformado en una campaña a través de redes sociales y en formaciones on line.
Lo podéis leer a nuestro Informativo boletín INFOCOOPERACIÓ N.º 7.
